Mitos en torno al aire acondicionado
Enfermedades y malgasto de combustible son algunas de ellas.

Una de ellas es la que hace mención a que el uso de aire acondicionado podría eventualmente producir cáncer. Al respecto podemos comentarles que hay quienes mencionan que un estudio arrojó como resultado que “el aire refrescante (acondicionado) emitía benceno, una toxina causante de cáncer, anemia, leucemia e incluso abortos, además de la reducción de las células blancas de la sangre”. En este mismo contexto, la investigación concluyó que “la cantidad de benceno aumentaba de manera considerable cuanto más calor hacía dentro del vehículo, esto a causa del calentamiento del plástico”.
Lo cierto es que si bien el benceno es en efecto una sustancia que en grandes cantidades puede causar daño, “el aire acondicionado no emite ningún gas tóxico dañino para el organismo” y por lo tanto, puede utilizarse sin temor a contraer ningún tipo de enfermedad (Asociación Mexicana de la Industria Automotriz).
Otro mito que gira en torno al A/C es el que se refiere al gasto excesivo de combustible que se provoca en el automóvil, principalmente en verano, época donde más se utiliza (por eso es que se recomienda ir encendiéndolo y apagándolo de vez en cuando). Esto tampoco es cierto, pues si bien es verdad que este sistema hace gastar un poco más de combustible, lo hace en un 7 u 8% de la potencia del vehículo, nada grave.
En ese sentido, el hecho de ir encendiendo y apagando el sistema, lo único que causa es que el A/C no funcione de manera correcta.
Por último, les contamos que asegurar que el uso del aire acondicionado durante un tiempo largo “afecta el funcionamiento general del motor” también es un mito, pues el sistema se encuentra diseñado precisamente para trabajar de manera constante. Para darle aún más realce a la función del A/C se recomienda que se utilice sólo si se conduce a una velocidad mayor a 80 km/hr y con las ventanas cerradas. En caso contrario, es mejor viajar con las ventanas abajo.